Método POSE
El Método POSE permite reducir la capacidad del estómago en un 20-25% sin realizar incisiones ni intervenciones quirúrgicas.
¿En qué consiste el Método POSE?
Se trata de un tratamiento de reducción de peso sin cirugía que permite reducir la capacidad del estómago en un 20-25% sin realizar incisiones ni intervenciones quirúrgicas.En lugar de ello, se realizan pliegues en el estómago a través de la boca utilizando endoscopia. Esto conduce a una disminución en la cantidad de alimentos ingeridos, lo que reduce el apetito, aumenta la sensación de saciedad y ralentiza la digestión.
Ventajas
Pérdida de peso desde el día siguiente a la intervención (hasta 1,5 kg por semana durante los tres primeros meses).
Sensación de saciedad inmediata y reducción del apetito.
No deja ninguna cicatriz, ya que es una reducción de estómago sin cirugía ni incisiones.
No presenta efecto rebote. Con un programa de reeducación alimentaria, no recuperarás el peso perdido.
Mejora general del estado de salud, resolviendo o mejorando significativamente otras patologías asociadas a la obesidad.
¿Cómo funciona el Método POSE?
Pre-tratamiento: Antes del tratamiento y para descartar cualquier patología que pueda desaconsejarlo, el cirujano realizará un exhaustivo examen médico. Si el paciente es considerado apto, deberá iniciar una dieta a base de líquidos antes de la intervención.
El tratamiento: La reducción de estómago sin cirugía se realiza mediante endoscopia y anestesia general, con una duración de aproximadamente 45 minutos, dependiendo de la anatomía del paciente. A través de la endoscopia, se introducen instrumentos por la boca del paciente hasta el estómago, donde se realizan los pliegues necesarios para alcanzar el tamaño deseado. Después de la intervención, el paciente debe descansar durante dos horas, generalmente en el hospital. No es necesaria ninguna otra intervención, ya que los pliegues se fusionarán de forma natural en las primeras ocho semanas después de la intervención.
Recuperación: Dado que no se trata de una técnica invasiva ni implica incisiones, la recuperación de un paciente después del Método POSE es simple, rápida y cómoda, con un riesgo mínimo de infección o complicaciones. El paciente puede reincorporarse a su vida laboral en uno o dos días después de la intervención, experimentando una pérdida de peso inmediata y notable.
En las dos primeras semanas, el paciente debe abstenerse de alimentos sólidos y seguir una dieta basada en líquidos, como agua, caldos, sopas bajas en grasas y zumos de frutas sin azúcares. Se recomienda caminar durante media hora al día durante este período. A partir del primer mes, los nutricionistas introducirán gradualmente alimentos sólidos en la dieta, que debe seguir durante el primer año para lograr una pérdida de peso progresiva y eficaz, así como para adquirir hábitos de vida saludables que eviten la recuperación de peso (efecto rebote) en el futuro.
¿Quiénes son candidatos ideales para el método POSE?
El Método POSE es adecuado para personas con problemas de obesidad y un Índice de Masa Corporal (IMC) de entre 30 y 40, lo que equivale a un exceso de peso de entre 15 y 35 kilos. También es adecuado para personas que padecen enfermedades relacionadas con el sobrepeso, como enfermedades cardíacas, presión arterial alta, diabetes, dolores musculares y otros riesgos asociados a la obesidad
Si, después de una evaluación previa con el especialista, se determina que el Método POSE es el tratamiento adecuado para ti, querrás conocer el precio. Nuestro equipo de especialistas en reducción de estómago te informará sobre todo el proceso y, después de un estudio para comprender tu estilo de vida y hábitos alimenticios, te ofrecerá el presupuesto final del tratamiento.
La principal diferencia es que el Método POSE no requiere cirugía. Es una intervención realizada por vía oral a través de una endoscopia, por lo que no se realizan incisiones, no deja cicatrices y la recuperación es muy rápida.
Con el Método POSE, es posible perder entre el 45% y el 55% del exceso de peso. Sin embargo, la efectividad del tratamiento también depende de la adherencia del paciente al programa de seguimiento y reeducación alimentaria establecido por un equipo de nutricionistas para desarrollar hábitos de vida saludables.
Notarás la pérdida de peso de manera inmediata, desde el día siguiente a la intervención, y gradualmente hasta alcanzar los resultados deseados.
No, dado que no implica cirugía ni incisiones, el postoperatorio es prácticamente indoloro y la recuperación es rápida.
Puedes reincorporarte a tu vida normal prácticamente de inmediato, en 24-48 horas después de la intervención. No experimentarás molestias significativas.
No, al contrario, es recomendable mejorar tu actividad física. Después de la primera semana, puedes reanudar todas tus actividades normales, incluyendo el ejercicio.
No, pero tampoco sentirás deseos de hacerlo. La reducción de la capacidad del estómago te hará sentir saciedad más rápido. Se recomienda evitar comidas excesivas después del procedimiento para que los pliegues cicatricen adecuadamente y para mantener un peso saludable.
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