La apariencia física constituye una de las inquietudes más frecuentes en la actualidad, especialmente cuando se trata de aspectos faciales. Uno de los tratamientos más solicitados es la operación de párpados caídos o también conocida como la blefaroplastia, destinada a corregir o modificar los párpados caídos para devolverles su posición original. En el siguiente post os contamos todo sobre este tratamiento. No te lo pierdas.
¿Qué es la blefaroplastia u operación de párpados?
Esta intervención busca corregir estéticamente los párpados superiores e inferiores para abordar problemas como párpados caídos, exceso de piel, flacidez y, en particular, las bolsas bajo los ojos. Estas alteraciones en los tejidos circundantes al ojo pueden tener diversas causas, como el paso del tiempo, la fatiga e incluso factores genéticos. La operación de parpados caídos se concibe como una medida para poner fin a estos problemas estéticos y restablecer la armonía facial.
¿Qué se consigue con la blefaroplastia?
A través de la blefaroplastia, los pacientes logran recuperar una apariencia más joven y fresca en la mirada, al tiempo que mejora su visión. Para muchos, el exceso de grasa, la flacidez y los párpados caídos representan una molestia significativa en la visión.
Beneficios de la operación de párpados caídos
La blefaroplastia ofrece una amplia gama de resultados satisfactorios para quienes se someten a ella. Uno de sus beneficios destacados es la recuperación de la firmeza en la región facial que se va perdiendo con el tiempo. Al eliminar el exceso de piel y grasa en el rostro, se restaura la apariencia previa a la caída de los párpados, reduciendo la formación de bolsas bajo los ojos.
Esta operación contribuye a eliminar por completo las bolsas, mejorando además la capacidad visual. Aunque no resuelve problemas de visión, los pacientes experimentan una mejora en su campo visual, ya que se amplía. La flacidez del párpado superior, al caer sobre el ojo, reduce el campo de visión, y la blefaroplastia aborda este problema.
¿Cómo es la operación de párpados u blefaroplastia?
La cirugía de párpados es sencilla, generalmente no supera la hora u hora y media de duración. Se realiza bajo anestesia local y sedación, y generalmente es un procedimiento ambulatorio, lo que implica una breve estancia en la clínica después de la intervención. Antes de la operación, un especialista en cirugía plástica planifica las áreas de piel que se eliminarán, comenzando comúnmente por los párpados superiores si se van a abordar los cuatro párpados
El procedimiento quirúrgico implica realizar incisiones a lo largo de las líneas naturales de la piel. A través de estas incisiones, se separa la grasa de la piel y los músculos subyacentes, extrayendo el exceso de grasa y piel que contribuye a la formación de bolsas. En ocasiones, también se elimina el exceso de músculo. La sutura final se efectúa en la piel, siguiendo los pliegues naturales de los párpados, para que sea lo menos visible y más natural posible. Al concluir la operación, se aplica una pomada en los ojos para hidratarlos.
La blefaroplastia u operación de párpados no está recomendada para mujeres embarazadas, personas con problemas de salud o aquellos con sequedad ocular. Asimismo, puede ser contraindicada para diabéticos, hipertensos, quienes tienen desprendimiento de retina, problemas de cicatrización, infecciones activas o trastornos de coagulación sanguínea. Esta intervención se lleva a cabo en dos formas: blefaroplastia inferior y blefaroplastia superior.
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